Buenos días desde la facultad de Educación de la UMA, en una interesante clase de didáctica en la que como futuros profesores hemos empezado con una gran pregunta: ¿Sirve la escuela?
Con esta pregunta hemos obserevado la calidad de la enseñanza hoy en día llegando a la conclusión de que la escuela actual está enfocada al sistema económico, por lo que se nos instruye por y para dicho sistema, llegando al punto de que las clases son prácticamente teóricas enfocadas a que un profesor o profesora llegue a clase, de la lección de ese día y posteriormente se vaya a su casa dejando a los alumnos con una cantidad de ejercicios y páginas que se tendrá que aprender, normalmente de memoria para después escribirlas en un examen y olvidarlas al poco tiempo.
Con este método no solo se desmotiva al alumno, sino que las clases se vuelven repetitivas y cada vez menos interesantes, hasta el punto que el alumno irá obligado a clase, puesto que así lo dice la ley, en cuyo caso apenas prestará atención en la clase. Se podría pensar que es culpa de la ley que obliga a los niños y niñas a ir a la escuela, pero no es así, es culpa de la manera en la que se enseña, la cual fomenta el aprendizaje de memoria a corto plazo y se olvida de temas importantes como la motivación del alumno o el fomento de la participación y trabajos en grupo.
Este es el resumen de un mini-debate que tuvimos el primer día de clase en el que nos planteamos si las escuela actual servía o no. Salieron palabras como anticuada, aburrida, teórica, entre otras muchas más para describir la escuela actual para nosotros, mis palabras serían desmotivadora y monótona.
Buenas tardes, disfruten del día.